le pregunté si no podía hacerlo psicodélico
"¿en qué sentido psicodélico?"
"en el sentido estricto de la palabra"
"ah, no, no"
CECI N´EST PAS UNE BLOGG.
le pregunté si no podía hacerlo psicodélico
"¿en qué sentido psicodélico?"
"en el sentido estricto de la palabra"
"ah, no, no"
una de las gotas se evapora en caída libre por entre los poros de una mejilla verde
una de las gotas del sudor que causa la modorra
una de las gotas se evapora en sudor y cae
una de las gotas, en picada, al suelo
las baldosas son del piso blanco negro y blanco
sube
y moja
la punta
de la media
de nylon
Una mano negra
decidió que en todos los minimercados (y los demás también) los tampones formen parte del staff de artículos ubicados detrás (exactamente detrás) del escritorito del chino
Recorrer siete veces contadas todo el perímetro del establecimiento pensando "no pueden ser tan hijosdeputa de hacerme cada vez ir a preguntar por los tampones"
Una mano negra (o amarilla, pienso)
"Ejhhhh ........ tampones?"
"Sí, atrás del escritorio"
¿nadie pensó que las chicas buscan tampones apurón en el chino renciabundo, contra su voluntad, justamente en el -período- de histeria pico?
No
Una mano negra y muy boba
Todo el sábado buscando el anillito fucsia. Me lo regalaron el miércoles a la tardecita y para el sábado ni-idea. De repente me vi y qué bueno que quedaría con el anillito fucsia, pero posta, especialmente qué bueno. Andaba por la compu, arriba, y pensaba en dónde podría haberlo dejado, que qué bueno con esta ropa. Habré hecho un pequeño relevo de lugares frecuentes pero no apareció. Después bajé porque había llegado la Beba. Como ella vino con una escena de haber perdido los auriculares en la puerta de mi edificio, aproveché y le dije que si llegaba a ver (interceptar / ver) un anillito fucsia me avisara. //Volvamos sobre nuestros pasos, le dije, no vamos a perderlos de la puerta a acá. Puerta-Ascensor-Pasillo al revés-Puerta-Entradita--Nada. Eh.Los auriculares estaban adentro de la cajita con el mp4....//Igual me había puesto el otro anillo, el verde de acrílico, porque total el pantalón era verde. Al final me olvidé, o me di por vencida, se fue Mer, vinieron Leo y Nora, comimos y nos fuimos volando a ver Batman (ja!)
El domingo a media tarde, ya después de mucho otros, Juan sube a preparar el cheque. U, desapareció la chequera. Pero la chequera siempre está en el mismo cajón. Eso desconcierta, no hay otro lugar. Pues entonces en mi cabeza puede ser cualquier lugar. Realmente me preocupé por un momento (siempre pensándole mal primero al personal de limpieza, lo odio porque al final no es nunca). Bueno, voy a ayudar. Escritorio de arriba, al lado de la compu. Muevo el primer obstáculo, lo primero que se me ocurre. Y abajo, casi superflúo, se destapa inocente el anillito fucsia (*perolaputamádre)
U acá está. Juan igual de toque encontró la chequera.